El placer ulterior

A priori perfumas la cima
Instauras quehaceres
Porque de los mediadores eres
Sublimas rutina casi sonando como ruina

Como evanescente procedes
Entre lo intrascendente, urgente y biológico
Bajando cimas, navegando mares
Saboreas el infinito
En un gramo de sal en tus labios
Un producto de la misma gracia
Del continuo enredo
Fractal y equivalente
De la vida y la muerte

Del sufrimiento haces arte
Del descubrimiento progreso
De los mares perfumes
y de las las cimas saberes
Cuentas estrellas pero alcanzas mas placeres

Piensas en la tumba
Lo placentero de ser perecedero
En el absurdo del suicidio
No encontrando placer ulterior
Inclusive un ser superior
Siendo el destino nada más que salino

Unos labios no tocados
Besos escritos no entregados
Vida no gastada
Bajo noches estrelladas
En la lentitud de las miradas
Una totalidad fragmentada

Infalible lo que ves
Imposible ver al sol perenne
Sin la impotente ceguera cósmica
Posible soñar y desear
Y es todo un placer
Uno realmente ulterior
Proceder, ser y perecer
En nada más que polvo estelar